Las pertenencias de los residentes que habitan el campamento de las Calles Harrison West MacArthur Boulevard en Oakland. Credit: Pete Rosos

Fred ha vivido debajo del puente de la autopista entre la calle Harrison y West MacArthur Boulevard en Oakland por los últimos tres o cuatro años.

Es un buen lugar para vivir, dijo: a pesar del ruido de la autopista, el lote donde él y otras 20 personas usan para vivir y dormir, y el cual es propiedad del Departamento de Transporte de California (conocido en inglés como Caltrans), está cubierto por la sombra de los árboles, y está a unos pasos de una gasolinera donde los residentes pueden ir por café. Los vecinos del área les dejan donaciones de ropa y comida. Bajo la sombra, el dibujo de una jirafa en uno de los pilares de la autopista resguarda a los habitantes. 

Los residentes de este campamento también han pasado por momentos estresantes a lo largo de los años. Los equipos de trabajo de Caltrans han limpiado el área varias veces y Fred dijo que los trabajadores se han llevado algunas de sus pertenencias como su identificación y una computadora. Nunca logro recuperarlos. 

Cada vez que este tipo de trabajo de Caltrans ocurre, los residentes tratan de trasladar sus pertenencias al lado de la acera y fuera de la zona de Caltrans para que sus artículos no sean confiscados, “pero eso no siempre es posible con el poco tiempo que dan de aviso,” dijo Fred.

Fred, quien no quiso dar su apellido, se sorprendió cuando leyó las noticias en febrero sobre la resolución a una demanda que exige que Caltrans pague entre $200 y $5,500 dólares a las personas sin hogar cuyas pertenencias fueron destruidas por la agencia en Oakland, Berkeley o Emeryville, entre diciembre de 2014 y octubre de 2019. Esa demanda colectiva se presentó por primera vez en 2016. A partir de esta semana, las personas que creen que son elegibles para el reembolso podrán comenzar a presentar reclamos.

Pero, dijo Fred, “la gente no sabe los pasos a seguir” para cobrar esos pagos, y muchas personas sin hogar ni siquiera saben que esa demanda existe.

Esto es lo que necesita saber sobre la demanda y cómo obtener un cheque.

Quién debe presentar un reclamo: si vivió en un lote de Caltrans, usualmente áreas debajo o al lado de una autopista, en Oakland, Berkeley o Emeryville entre diciembre de 2014 y octubre de 2019, y cree que Caltrans se deshizo de sus pertenencias personales puede presentar un reclamo de reembolso.

Si sus pertenencias pueden ser reemplazadas por $200 dólares o menos, y no experimentó ninguna angustia física o emocional, es posible que se le puedan reembolsar $200. Si sus pertenencias se pueden reemplazar por $1,000 dólares o menos, es posible que se le deba $1,000. Si el valor fue superior a $1,000 dólares y experimentó angustia física o emocional. Si tenían un valor sentimental es posible que se le deba $5,500 dólares.

Cómo presentar un reclamo: puede llamar al 510-467-0105 para obtener asistencia gratuita y recibir una copia del formulario de reclamo. Deje un mensaje en español y un representante le regresará la llamada para ayudarlo a llenar todo el papeleo. El formulario incluye preguntas detalladas sobre lo que experimentó con Caltrans y qué tipo de pertenencias fueron destruidas.

“Es una forma complicada”, reconoció Elisa Della-Piana, directora legal del Comité de Abogados para los Derechos Civiles. Ella dijo que el proceso no debe estresarlo: “Cualquier persona que complete el formulario debe contactarnos para obtener ayuda”, dijo.

Una vez que complete el formulario, debe enviarlo por correo o entregarlo personalmente en uno de los siguientes lugares antes del 16 de octubre de 2020. Un abogado puede hacer esto por usted.

Homeless Action Center, 2601 San Pablo Ave., Oakland, CA, 94612

Homeless Action Center, 3126 Shattuck Ave., Berkeley, CA, 94705

Algunos materiales de la demanda estipulan que también puede llevar los formularios completados al East Bay Community Law Center, pero sus oficinas están cerradas debido a la pandemia, por lo que el centro no está aceptando ningún tipo de papeleo en persona. 

¿Qué es lo que puede esperar?: Caltrans no revisará los reclamos hasta que todos sean enviados después de la fecha fijada del mes de Octubre. Por lo tanto, las personas probablemente no recibirán sus cheques hasta noviembre más o menos, dijo Della-Piana.

¿Qué más debe hacer Caltrans?: Además de pagar hasta $1.3 millones de dólares directamente a personas sin hogar, la agencia también tiene que pagar $700,000 al Centro de Acción para Personas sin Hogar y $3.5 millones en honorarios de abogados. La resolución requiere que Caltrans cambie la manera en que lleva a cabo los trabajos de limpieza y desalojos de los campamentos de personas sin hogar en todo el estado. Deben dar un “aviso de desalojo” con 48 horas de anticipación, y publicar un número de teléfono al que las personas puedan llamar para recuperar cualquier pertenencia que haya sido tomada, la agencia debe de guardar todos los artículos por lo menos 60 días.

Según el acuerdo, Caltrans también lanzará un programa piloto en Oakland, Berkeley y Emeryville, donde publicará en línea los horarios mensuales de las próximas limpiezas. Antes de cualquier limpieza, los trabajadores dejarán bolsas de basura para los residentes que no hayan podido empacar sus cosas. Se requiere que la agencia almacene todo lo que quede que valga más de $50 dólares o sean artículos personales como anteojos, carpas o fotos. Los trabajadores pueden destruir todo lo que tenga moho, esté infestado de insectos o roedores, o que sea tóxico.

Oaklandside le preguntó a Caltrans la semana pasada si estos cambios se han implementado y por comentario acerca de la resolución de la demanda. Actualizaremos la historia si Caltrans responde.

Desde que se llegó al acuerdo, solo ha habido una limpieza de Caltrans en Oakland, según la agencia y los abogados que se encuentran trabajando en el caso. Esa limpieza que duró una semana tuvo lugar en uno de los campamentos más grandes de la ciudad, el campamento Wood Street de West Oakland. Caltrans dijo que el Departamento de Bomberos de Oakland le pidió a la agencia que despejara un camino de acceso a incendios en el sitio saturado de habitantes. En ese caso, la agencia notificó a los residentes con varios días de anticipación y publicó un número de teléfono donde podían llamar para reclamar sus cosas. El aviso también decía que Caltrans almacenaría los artículos durante 90 días, más tiempo del requerido por el acuerdo. Solo una persona logró regresar al campamento, dijeron los defensores.

Della-Piana dijo que ha visto cambios positivos en el comportamiento de Caltrans desde el acuerdo. Anteriormente, dijo, la agencia a veces realizaba desalojos de campamento con solo unos minutos de aviso, “diciéndoles a las personas que solo podían quedarse con lo que podían llevar.” Sus clientes perdieron tiendas de campaña y medicamentos, dijo.

Uno de los demandantes, Jim Leone, tenía una libreta de nombres y números telefónicos la cual fue destruida durante un desalojo de Caltrans. Trágicamente, dijo Della-Piana, Leone murió en la calle en Oakland hace solo un par de semanas.

“Era tan maravilloso,” dijo. “Pasó mucho tiempo defendiendo a otras personas.”

Antes de morir, Leone logró saber el resultado de la demanda, pero, Della-Piana dijo que se encuentra triste al saber que no llegó a recibir lo que se le debía.

Este artículo fue traducido por Azucena Rasilla.

Natalie Orenstein covers housing and homelessness for The Oaklandside. She was previously on staff at Berkeleyside, where her extensive reporting on the legacy of school desegregation received recognition from the Society of Professional Journalists NorCal and the Education Writers Association. Natalie’s reporting has also appeared in The J Weekly, The San Francisco Chronicle and elsewhere, and she’s written about public policy for a number of research institutes and think tanks. Natalie lives in Oakland, grew up in Berkeley, and has only left her beloved East Bay once, to attend Pomona College.